Empty Chairs at Empty Tables. [Libre]

Una buena obra de teatro acompañada por opera debia de finalizar con una tragedia, me gustaria saber que tipo de tragedia, pero que esperaba, que acontesiera si era la opera de Les Misserables era la hora donde empezaba la epica canción o mejor dicho una de mis canciones favoritas Empty Chairs at Empty Tables, me identificaba con ella pues recordaba aquel acontesimiento en donde solo Jane y yo nos encontrabamos en la leña, mis pocos amigos ya no eran mis amigos o si lo eran ya estaban, aunque en este caso, estos amigos literarios muriesen en una guerra. Eso me hubiese gustado mas que mis amigos se hayan muerto, pero ahora mi familia y mis amigos era el clan Volturi.

Al terminar la canción empezaron los aplausos, y el publico fue cuando mas mostraba su interes, pero yo solo di unos leves aplausos pero sentia que alguien me miraba, me pude haber volteado pero quise llebar algo de cordura en mis actos como siempre lo habia hecho asi que no hice mas que ver la obra, en el momento de silencio solo musite - porque eres tan cobarde para no sentarte junto a mi- no sabia quien era pero esta frase en resumen u otras palabras le invitaba a sentarse junto a mi en lugar de mirarme, vaya que tenia la mirada pesada, no sabia quien era pues su aroma se mezclaba con la de los de mas ahi presentes en el teatro.

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Me encontraba en Volterra, habia viajado sola porque necesitaba despejar la mente.En estos instantes estaba caminando por las calles y llevaba la capucha de mi sudadera puesta porque tenia los ojos dorados pero no me habia dado ni cuenta. Vi un teatro y decidí entrar, habia mucha gente y me escondi entre la gente, en la cola de las entradas.Llegó mi turno y me puse las gafas de sol, pero sabia que notaban mi inmortalidad en mis ojos.La mire y dije- Una entrada para los miserables, por favor- sonrio y dijo- Vale, señorita, que disfrute-sonrei y cogi la entrada, dirigiendome a la sala y caminé por unos sitios y oi una voz bastante peculiar, sabia quien era, la voz dijo-porque eres tan cobarde para no sentarte junto a mi- llevaba la capucha y la gafas, lo que menos deseaba en estos momentos era encontrarme con uno de mis enemigos, los Volturi,gruñí y oli su aroma. No era Aro, ni Cayo , ni Marco, pero era una de sus armas letales, un guardia, Alec Volturi, respiré hondo y dije- No lo habia visto ,Alec- Sonrei quitandome la capucha y las gafas y mirandolo diciendo- ¿Sorprendido de mi visita, querido? ¿Me vas a entregar a tus amos?- No me caian muy bien pero debía ser cortés aunque si él se atrevia a atacarme su poder no me haria daño a si que no debia preocuperme mucho tampoco.