What's happening? [Isis - Helene]

Hoy había acabado pronto de la universidad. Desde que me licencié sólo iba un par de horas a revisar varias cosas del máster y poco más. Era más light porque no me suponía tampoco mayor problema el estudio. Tenía que presentar varios proyectos y lo más sencillo era que los podía sacar de mi trabajo, así que estaba conforme y relajada.

Salí de la universidad y me dirigí a mi coche, completamente arreglado y reformado por mi koi, Souta, después del accidente que tuve gracias a Jerome. Las luces parpadearon dos veces antes de que llegara, indicativo de que el seguro estaba quitado. Entré dejando mi folder en el asiento del copiloto y arranqué velozmente para dirigirme al colegio de mis sobrinos. A veces iba a recogerlos a la puerta de la escuela y los llevaba por ahí a dar una vuelta por la ciudad, a jugar con ellos y esas cosas.

La alegría de sus caras al verme apoyada en el coche mientras ellos salían me hacía sonreir aunque mis últimos días no hubieran sido muy buenos. Mis sobrinitos sabían cómo alegrarme el día. Luke me solía traer cosas y me contaba muy animado lo que hacía a lo largo de la mañana, y Midori me enseñaba todos los dibujos que le iba a regalar a sus padres y que había hecho con mucho esmero en clase. La verdad es que la pequeña era talentosa.

Los llevé a comer algo para merendar y fuimos al parque, donde estuvieron jugando un rato hasta que se cansaron y decidí que era hora de llevarlos a casa antes de que fuera tarde. Todavía tenían que bañarse y todo lo demás.
Subimos al coche y me dirigí, por las calles de Tokyo, al bloque de pisos de Takeshi. Aparqué en un lugar adecuado y fuimos de la mano los tres hasta llegar a la puerta del piso de mi cuñado.
-Ya estamos, peques. Ahora tenéis que saludar a mamá... -No había nadie más en casa, por el olor.

Y cuando la puerta se abrió los niños entraron como locos...¡A pedir el mando a distancia de la TV! Los miré y luego a Isis y no pude evitar reír.
-Hola, Isis, ¿cómo va todo?
Le saludé a la mujer de mi cuñado, el cual seguramente estaba trabajando.

ultimamente habia estado ocupada por mi nuevo trabajo como columnista en una revista de modas... quien lo diria? pero luego de pensarlo bien, tenia deseos de trabajar y como en mi juventud habia tenido ciertas habilidades en ello, busque trabajo en varias editoriales y aunque habia resibido el visto bueno de casi todas ellas, me desidi casi por exigencia de mi amada hermana Loire por una reconocida revista de modas en Japon; lo bueno de esto es que en mi columna podia hablar de temas variados y no hacia falta moverme de casa, lo que me dejaba tiempo para estar con los niños todo el dia.
me habia hecho bastante buena en lo que ahora hacia, pues a solo un mes de empezar ya tenia bastantes adeptos a mi columna, cosa que me alegraba mucho.
habia acado mi articulo del dia y luego de ello, prepare el almuerzo de los niños; llame a Take para preguntarle como estaba, pero no me extendi mucho en la llamada por qeu tenia que entrar a una reunion importante.
de pronto oi que alguien entraba al departamento y la voz de helene seguida de mis niños que ya entraban como un tornado en el lugar, se hiso presente.
abrace a mis hijitos cuando se me acercaron y los llene de besos solo para saludarlos, aunque ya los habia visto temprano antes de ir al colegio, de todas formas esa era nuestra usual manera de decirnos hola entre mis niños y yo.
mire a helene y le sonrei
_ hola Helene... gracias por traer a los niños, realmente tenia qeu acabar un articulo de ultimo momento y no podia ir a retirarlos...._ cargue a Midori en brazos mientras ella me pedia que le diera su juguito antes del almuerzo y Luke rogaba por el control de la Tv el cual juraba habia dejado sobre la mesa para tomarlo a penas llegaba XD_ hijo el control esta aqui... pero solo un ratito por qeu el almuerzo ya esta listo...._ comente sonriendole al darcelo y sentar a su hermanita a su lado para ver la Tv.
camine hasta la cocina seguida por helene mientras acababa el almuerzo
_ como has estado Helene...?_ pregunte mientras bajaba el fuego de la cocina y terminaba por otro lado de mesclar las ensaladas_ olle... perdona el comentario, pero te ves muy...._ sonrei divertida_ muy bella hoy, mujer... creo qeu debo felicitar a Souta por ponerte esa sonrisa que traes....

Caminé con calma detrás de los niños, que habían entrado como un torbellino en la casa. La pequeña Midori había desistido del mando a distancia y lo había cambiado por su merienda. ¡Vaya si tenía hambre la niña! Así que, al final, el control lo tenía Luke.
Isis me había dicho que no podía recogerlos a la salida del colegio y Takeshi estaba de reunión así que justo cuando salí de la universidad fui a recogerlos, sin ningún problema. Lo hacía varias veces y me agradaba pasar tiempo con mis sobirnos, y más cuando había entrenado duramente para ser capaz de protegerlos.
La mujer de mi cuñado había encontrado un nuevo trabajo y bastante cómodo, cabe decir, pues lo hacía desde casa.
La seguí hasta la cocina porque la pequeña reclamaba su merienda cuanto antes y mientras miraba la sala se me dibujó una sonrisa en la cara por lo que había dicho Isis sobre Souta al preguntar sobre mí.
-¡Eh! ¿Tanto se me nota? No sé... Creo que nadie puede estar de bajón al lado de Souta. ¡Es imposible!
Comenté soltando alguna leve risotada al mencionar la gran facilidad que tenía mi koi para sacarle una sonrisa a la gente. Era innato en él. -Aunque también tenía la facilidad de molestar a cualquiera; por suerte no estaba en ese grupo-.
-Pero sí que le puedes felicitar.
Aclaré sonriendo, apoyada ligeramente en el marco de la puerta.
-¿Y Takeshi? ¿Aún sigue en la reunión? Me mandó un mensaje hace un rato para avisarme que no podía ir a buscar a los niños a clase.

Se oía a los niños correr por la casa, sacar juguetes, poner en la televisión unos dibujos que les gustaban... Si que estaba animada siempre la casa de Take e Isis.
-Oye, ¿qué tal estos tres meses? Tú ese día no luchaste en la guardia rumana, ¿no?
Pregunté refiriendome al desenlace de la guerra entre Volturis y Rumanos.

Acabe de preparar la merienda de los niños y puse la mesa, mientras helene me contestaba alegremente
_ la verdad si....te ves radiante...._ la mire como finjiendo escrutar su mirada_ olle ,si estas embarazada mejor dilo ahora, asi ya compro los regalos para el bebè...._ comente divertida, pero no me parecia raro si helene acababa embarazada a la brevedad
pregunto luego si takeshi seguia en la reunion, a lo cual asenti un poco resignada
_ si... al parecer era algo tedioso que tenia qeu hacer por el mismo... no podia dejarlo pasar, aunqe realmente ignoro de que se trata....
de lejos se oia a mis niños jugar o mas bien, armar mucho desorden con animos de jugar, pero sin mucha posibilidad de que jugaran a nada, luego de desparramar tanto juguete; al final de tanto jaleo siempre optaban o por ver televicion, jugar un video juego o simplemente dibujar, asi que el desorden de juguetes quedaba olvidado para ellos, aunque al final debia de recoger todo yo XD
helene de pronto pregunto si yo habia participado de la lucha entre volturis y rumanos.
negue lentamente sin entender a que iba realmente su pregunta
_ no... yo estaba oculta con los niños en ese momento.... hubiera querido participar, pero ellos eran muy pequeños como para dejarles, asi que yo no fui.

Abrí mucho los ojos cuando mencionó un posible embarazo e instantáneamente reí un poco.
-No, no. No estoy embarazada.
Comenté entre risas mientras negaba con la cabeza. Los niños no paraban de correr por la casa y tirar juguetes por ahí. ¿Les molestaría a los vecinos de abajo? Me pregunté mientras contemplaba a mis sobrinos con una sonrisa. Eran tan tiernos... Aunque a veces discutían por tonterías pero como todos los niños.

Isis me dijo que Takeshi había tenido algo tedioso que hacer en su trabajo, y luego, que ella no había participado en la reunión porque tenía que proteger a los niños y llevárselos lejos. Era lógico, claro. Alguien debía encargarse de los pequeños, y quién mejor que su madre.
-Hiciste bien. Yo tampoco fui, no me dejaron. Pero dijeron que fue muy sangriento. Menos mal que los niños estaban a salvo. ¿Estabas en Brasil?
Ella dejaba la merienda de los niños en la mesa y ellos, rápidamente, fueron a comer casi sin necesidad de que su madre los llamara. ¡Sí que tenían hambre!
-Ésto de que los Volturi hayan llegado al poder... No parece traer nada bueno.
Musité más para mí que para ella, porque era lógico que algo tramaban aunque hubieran estado silenciosos.