The Awakening (Bonnie)

La lluvia se alzaba torrencial, empapando las calles y a mi, pero a mi no me importaba en absoluto. De todas formas no iba a derretirme si me mojaba un poco después de salir del trabajo. Aff, trabajo, jamás imaginé que estuviera de nuevo alguna vez en la necesidad de trabajar para poder comer aunque en ésta ocasión lo hacía por contribuir a al mantenimiento del departamento de Dimitri y Violet. Sabía que ellos pagarían mi comida y quizás mi ropa si así lo requería, Dimitri tenía pinta de tener dinero de más pero yo no quería abusar de sus bondades. Mucho menos si..... y entonces lo escuché. Siempre había sido una humana hipersensible, siempre escuchando cosas que los demás no eran capaces de escuchar, y allí estaba un espíritu de... algo. Algo que clamaba con fervor ser liberado de su prisión.

El lamento me llevó a un castillo antiguo internado en una zona completamente desconocida para mi. Al parecer todo estaba en calma, vacío.... excepto por aquel espectro que clamaba por ser liberado. ¿Sería un fantasma? pero no podía verlo ni sentir aquel frío sepulcral propio de uno.... me encontré en una habitación nueva, aunque había algo en ella fuera de su decoración que me daba una mala espina. Eché las runas al aire y las atrapé de la misma forma, señalaban una pared la cual comencé a tocar como si se tratara de una puerta y ¡Vamos! ¡Estaba hueca! Me las apañé como pude para deshacerme de la pared falsa hasta que en un punto, dado a su antigüedad, esta cedió por sí sola.

Durante minutos descendí por unas escaleras largas a la luz de un candelabro, lo único que encontré para iluminarme, aunque posiblemente haya habido una lámpara de gas en algún lugar confiaba más en el poder de los elementos que en mi pericia para encender cualquier artefacto que no fuera mi iPhone. Cuando bajé encontré todos a oscuras pero una manifestación de energía bastó para encender las velas de una araña de cristal que había vislumbrado a la tenue luz del candelabro. Se trataba de una cripta, el lugar estaba fuertemente sellado en todas sus paredes y el suelo con círculos sagrados dibujados en sangre que ya parecía seca. Un sarcófago habían dispuesto allí, la escena era tétrica, y más aún el pentagrama que adornaba la tapa del mismo. ¿Era una momia? No... ¿Qué era...? Me senté en el suelo, en el medio de un símbolo, y cerré los ojos mientras dejaba que la energía atascada en aquella habitación fluyera a través de mi. Era un híbrido, estaba vivo y probablemente hambriento..... pero también estaba lleno de odio, ira y sobretodo dolor.

Mi consciencia me dijo que por algo le habrían encerrado y mi ética me dijo que no podía dejarle allí, en cambio mi instinto parecía apagado como si alguien le hubiera desconectado de la caja de poder que se suponía ser mi cerebro. O lo que yo llamaba comúnmente, para hacer reír a mis amigos, como el hamster en la ruedita que potenciaba mis cables. Finalmente decidí que no importaba si estaba abriendo la caja de Pandora, yo no iba a poder dormir sabiendo que había un hombre o una mujer allí atrapado y que yo no le había socorrido. Serás idiota, Bonnie, pensé mientras cuidadosamente sacaba mi athame de un compartimiento interior en la bota. Lo primero que hice fue trepar entre algunos muebles, agradeciendo la ligereza de mi cuerpo y trazar una raya vertical rompiendo cada uno de los sello en cuatro paredes. Fue un trabajo forzoso y tardé varias horas para romperlos por completo pero al final solamente quedaban dos, el del sarcófago y el del suelo inmediato.

Me posicioné en medio del pentagrama intacto del suelo. Rápidamente busqué en mi grimorio el hechizo para deshacer una trampa para vampiros, la cual tenía mi abuelo por si alguna vez le servía. Tras recitar el conjuro eché una cerilla encendida sobre el sello del sarcófago, el sello de sangre se consumió mientras la araña comenzaba a bambolearse de un lado a otro ante el torbellino de poder que se liberaba. Y me fui cagando leches, con suerte no me comería.

#Partida abandonada por inactividad.